La semana pasada, la casa de Aberdeen (Washington) en la que vivió el icono de Nirvana, Kurt Cobain, entre 1968 y 1984, fue aprobada oficialmente para su inclusión en el «Registro de Patrimonio» de edificios de importancia cultural del Departamento de Arqueología y Conservación Histórica del estado de Washington. El actual copropietario de la casa, Lee Bacon, dijo a la Rolling Stone que casi ha terminado de recrear la casa y devolverla a cómo estaba en la época de Nirvana, con planes de abrirla la próxima primavera para alguna que otra visita privada. «Nuestro objetivo es convertir la casa en un proyecto de homenaje a los primeros años de la vida y la carrera de Kurt, con detalles dignos de un museo», dijo según la transcripción de Blabbermouth. «El siguiente capítulo es cómo hacerlo realidad».

Bacon y su esposa Danielle compraron la casa a la familia Cobain en abril de 2018 por 190.000 dólares. Los Bacon han pasado los últimos tres años trabajando con la familia a través de una meticulosa restauración de época en curso que se alinea con la vida de Kurt. En la actualidad, la casa incluye mobiliario, fotografías, grabaciones de audio y vídeos que documentan los acontecimientos, las historias más divertidas y los momentos memorables de la vida y la carrera de Kurt.

La casa fue el hogar de la infancia de Cobain durante sus años de formación. Fue aquí donde el joven de ojos azules, pelo rubio y mucha energía, con inusuales habilidades artísticas y una amplia imaginación creativa, cosechó su pasión por la música. La casa proporcionó a Cobain un lugar para practicar y experimentar con una gran variedad de instrumentos musicales, dando a Cobain la base fundamental para su posterior dominio de la composición, el canto y la guitarra en Nirvana.

Hoy en día, la casa de la infancia de Kurt se conserva en gran parte y contiene muchos artefactos familiares de aquellos años. La casa recibe regularmente visitas de fans nacionales e internacionales que buscan capturar una fotografía del exterior de la casa y ver el lugar donde Cobain pasó su vida mientras crecía. Los fans que la visitan comparten con frecuencia el interés para que la casa se convierta en un museo en el que los fans tengan un lugar en el que sentirse conectados con el músico.

El bungalow de cuatro dormitorios y 140 metros cuadrados se puso originalmente a la venta en el mercado por 500.000 dólares en 2013 antes de que el lugar se volviera a listar por 400.000 dólares en marzo de 2015, y tuvo su precio rebajado a 329.000 dólares en agosto de 2015, 299.000 dólares en abril de 2017 y 225.000 dólares en octubre de 2017.

A pesar de un parque con el nombre de Cobain y una estatua erigida en 2014, el biógrafo de Nirvana Charles R. Cross dijo a The Pulse Of Radio hace varios años que no creía que Aberdeen hubiera hecho lo suficiente para honrar a su residente más famoso. «Kurt es la persona más famosa que ha nacido en Aberdeen y tal vez la persona más famosa que nacerá jamás, y la ciudad no ha hecho casi nada para honrarlo», dijo. «La ciudad está despertando poco a poco. Aberdeen es una ciudad que ha tenido problemas económicos durante seis décadas, y si pudieran impulsar su turismo solo un poco, creo que ayudaría a todos los implicados».